PINCHITADA
- Maceubalím
- 24 ago 2016
- 2 Min. de lectura
Aquí en Ceuta, uno no deja de aprender palabras nuevas y anoche pudimos descubrir, algunos de nosotras, el vocablo pinchitada. Además de ser una palabra sencilla, es a la vez, lógica, ya que barbacoa queda demasiado general para algo tan concreto como son los pinchos al fuego.
Aunque la idea original era hacerlo en la playa, por motivos de legalidad, nos fue imposible. Es por ello, que la cabeza pensante del campo, Cristina, hizo posible llevarlo a cabo en la impresionante terraza de nuestro restaurante habitual, La Peña.
Al llegar al restaurante teníamos una bandeja con la carne cortadita, aliñada y especiada para empezar a montar los pinchos. Fueron Alberto y Bilal (foto 1) los voluntarios encargados de cocinarlos y gracias a los cuales pudimos cenar. Nuestros dos chicos se ataviaron de delantal y gorro para estar frente a la brasa.
Una vez montados todos los pinchos y a la espera de su cocción fuimos pasando hacia la terraza. Varias mesas largas con pan cortado, sándwiches de jamón dulce y queso para aquellos con el estómago revuelto, agua y nuestro querido tinto de verano. El que nos ha acompañado desde los inicios del campo de trabajo.
Poco a poco iban saliendo las bandadas de pinchos (foto 2) y todos disfrutamos del sabor de la carne aliñada y en su punto. Al acabar toda la comida de la mesa y con la barriga bien llena decidimos que era conveniente ir al hotel al descansar, no sin antes pasar por la heladería La Golosa. ¡Qué heladería! Uno cuando se para delante de las neveras, no sabe qué sabor elegir. Desde los más comunes hasta los más exóticos. Muy recomendable.

Foto 1. Bilal y Alberto en los fogones

Foto 2. Pinchos
Comments